
Como se construye una voz
Por Claudio Alsuyet
Vilma, mi madre, eligió mi nombre. Mi segundo nombre, Alberto, y mi apellido son el sello del vacío más profundo de mi vida.
Será por ese vacío que inicié un eterno soliloquio donde los fantasmas que conviven conmigo, nunca me contestan, les hablo y no contestan, solo en sueños veo sus gestos, pero nunca hablan o tal vez no puedo oírlos. Por eso mis palabras se hacen música, para decirles lo que ellas parecen no expresar. Les hablo desde mis sentimientos más profundos, finalmente, muchos de mis fantasmas son quienes les ponen sonido a mis palabras, ya que muchos existen, los veo, están o estuvieron presentes. Con algunos a veces tomábamos mate y con otros también a veces tomamos un café.
Por eso construyo una voz que solo transmite símbolos que hablan al alma, ya que no se hablarle al hombre, al ser humano.
A veces, sólo a veces un poeta dice lo que quiero decir, entonces tomo sus palabras y las hago mi voz, para que alguien que no soy yo las diga con el sonido que le aportan mis sentimientos.
Esa voz, que finalmente son sonidos que no suenan como mi voz, justifica cada día, cada mañana, cada noche.
A raíz de esto que comento, me viene a la memoria un fragmento de mi querido Lic. Julio Palacio escritas en un programa con motivo de un estreno: …“Claudio Alsuyet es, para emplear el devaluado término, un artista, es alguien que puede transformar sus fantasmagorías en materia sonora”.
Una vez decidí, por lo menos eso creo, ser quien soy por lo que callo, por lo que no digo y es así que mi voz se transformó en un vacío que es expresado por mi música.
Será por empatía, no lo sé, un día comencé a disfrutar de las voces de idiomas que no conozco y no entiendo. Sus sonidos me llevan a un mundo donde no necesito entender, solo escuchar. No sé que dicen, tampoco quiero saberlo, son sólo voces que suenan, son colores, son sentimientos, anhelos, frustraciones, ira, ternura, que percibo y creo entender. Aunque no me engaño, sé que soy un animal al que pueden engatusar fácilmente con palabras, usando otra intención en el tono de la voz.
Por no saber hablar, por no saber escribir, por no saber dibujar, construí esta voz que es mía, porque creo que yo la hice, … pero ahora que lo pienso un poco más, es la que descubrí y me expresa, la otra, la que se produce en mis cuerdas vocales y sale por mi boca, solo es un pobre instrumento que describe con el simbólico sonido de las palabras lo que mi interlocutor desea o puede interpretar y a veces, solo a veces, cuando nuestras vivencias y sentimientos se parecen creemos que entendemos lo mismo.

Claudio Alsuyet
(Buenos Aires, 1957), es autor de una importante producción para orquesta, coro, grupos de cámara y medios mixtos. Estrenado en varios continentes, receptor de premios y becas, Alsuyet fue compositor residente en el Instituto Superior de Arte del Teatro Colón en el año 2000, del cual también fue su Director del 2015 al 2017.
Alsuyet recurre diferentes medios, géneros y sonoridades, desde voz y piano en sus lieder hasta combinaciones de instrumentos y procesamiento en vivo.
Buenos Aires y su música popular están muy presentes en su producción, reflejado especialmente en su serie de obras Buenos Aires.
Para más información acerca de su obra puede visitar su sitio web: www.claudioalsuyet.com
Las imágenes fueron cedidas por Claudio Alsuyet.
Eva Lopszyc
Claudio Alsuyet GRACIAS por compartir. Bellisimamente sinceras, sentidas y transparentes tus palabras, todas ellas tan musicalmente dichas.GRACIAS nuevamente por compartir.Abrazo🍀